1. existen edificios más altos y caminos más amplios, pero pequeños temperamentos y estrechos puntos de vista.
2. Gastamos más pero disfrutamos menos.
3. Tenemos casas más grandes, pero menos familias.
4. Tenemos más compromisos, pero menos tiempo.
5. Tenemos más conocimientos pero menos debate.
6. Tenemos más medios pero menos salud.
7. Multiplicamos nuestros bienes, pero reducimos nuestros valores humanos.
8. Hablamos mucho, amamos poco y odiamos demasiado.
9. Llegamos a la luna pero tenemos problemas para cruzar la calle y conocer a nuestro vecino.
10. Conquistamos el espacio exterior pero no el interior.
11. Tenemos dinero pero menos moral.
12. Es tiempo de más libertades pero menos alegrías.
13. Es tiempo de comidas pero menor nutrición.
14. Son días en los cuales llegan dos salarios a la casa, pero aumentan los divorcios.
15. Días de casas más lindas, pero de hogares desechos
16. Tenemos exceso de religión pero no conocemos al Señor nuestro Dios.
Por eso propongo, que de hoy y para siempre, no deje nada para una ocasión especial, porque cada día que usted vive, será una ocasión especial.
Por eso busque a Dios y conózcalo personalmente.
Lea mas y siéntese en el balcón y admire el paisaje sin importarle las tormentas. Pase más tiempo con su familia y con sus amigos. Coma y disfrute sus platos preferidos. Visite los sitios y lugares que le gusta.
Recuerde que la vida es una sucesión de momentos para disfrutarlos, y no solo por sobrevivir. No guarde la vajilla, su mejor perfume. Sino úselos. Haga lo que desea hacer ahora, y no “en un día de estos”.
Dígales a sus familiares y amigos cuanto los ama.
Por eso no posponga nada de aquello que agregara sonrisas y alegrías a su vida.
Cada día, hora y minuto son especiales para usted y los suyos, porque no sabe si será la última cosa que Dios le permitirá hacer en esta vida.