sábado, 24 de julio de 2021

Los pica piedras

 

Los pica piedras

Fuente:Hanna Barbera Wiki

 

 


Los Pica piedras (en inglés The Flintstones) es una serie de animación de la productora Hanna Barbera Productions. Fue estrenada por la cadena estadounidense ABC el 30 de septiembre de 1960 y fue emitida hasta el 1 de abril de 1966, con un total de 166 episodios además de algunos especiales y películas que se han hecho.Actualmente se sigue retransmetiendo en Tooncast.

El mejor dibujo de Hanna Barbera

Los Picapiedra, de Hanna-Barbera fue una de las dibujos más exitosas de la historia de la televisión. Fred Flintstone y Barney Rubble eran Pedro Pica piedra y Pablo Mármol. Reflejaban la clase media de la sociedad americana con sus salidas al campo, barbacoas en el jardín, partidas de boliche y tronco móvil familiar. El genial doblaje al español con la voz brutota de Pedro diciendo eso de: "¡Ya cállate, enano!". Las sufridas esposas, Betty y Vilma tenían que aguantar las ideas de Pedro y la complicidad obligatoria de Pablo, de donde nunca salían bien. Después de tantos años, aún siguen teniendo audiencia alrededor del mundo. La acción tiene lugar en un pueblo llamado Piedra dura en la Edad de Piedra, pero con una sociedad idéntica a la de Estados Unidos a mediados del siglo pasado. Es un mundo fantástico en el que los dinosaurios, los tigres dientes de sable, los mamuts y otros animales hoy extintos coexistían con los humanos, quienes usaban tecnología similar a la del siglo XX, pero en la que los animales sustituían a los aparatos eléctricos. Los personajes conducían automóviles formados por troncos de madera (tronco móvil), ruedas de piedra, en los que el motor era sustituido por el empuje de los pies de sus ocupantes. Las vestimentas eran de piel animal.

Uno de los recursos humorísticos utilizados en sus aventuras era el empleo de animales en las acciones cotidianas. Por ejemplo, cuando un personaje tomaba fotografías con una cámara instantánea, se mostraba el interior de ella para ver que era un ave la que realizaba la fotografía picando una roca con su pico también cuando uno prendía la TV en el control remoto salía un pajaro para prenderlo y otros más. Los personajes principales de la serie se conformaban por dos familias que eran las protagonistas: Los Picapiedra formada por Pedro Picapiedra, Vilma Picapiedra y Los Mármol integrada por Pablo Mármol y Betty Mármol. En episodios posteriores se agregaron dos personajes más: los bebés Pebbles Picapiedra y Bam Bam Mármol, además de la mascota Dino.

Historia


 

 






Originalmente la serie se iba a llamar en inglés The Flagstones, pero en el último momento el nombre fue cambiado para evitar confusiones con el nombre Flintstones.

La serie fue originalmente apuntada hacia el público adulto, como se pudo comprobar al ver que el show fue presentado por la compañía de cigarros Winston durante algún tiempo. Además, los personajes aparecieron en varios de sus anuncios televisivos. De hecho, Pedro y Vilma fueron la primera pareja televisiva animada en aparecer juntos en cama y en tratar el caso de la maternidad (en el caso de los Pica piedra), o de la infertilidad (en el caso de los Mármol). Éstos deciden adoptar un niño (Bam-Bam) al no poder tener uno por sí mismos.

Fue la primera serie de caricaturas en presentar artistas invitados de moda, tanto músicos como actores. Se pueden reconocer perfectamente las apariciones de Rock Hudson, Cary Grant, Tony Curtis, Ed Sullivan, Alfred Hitchcock, etc. aunque con el nombre o apellido cambiado para apropiarlos a la Edad de Piedra. Tal es el caso de Ann Margret, que en su participación se le llamó Ann Margrock (o Ana Margarroca en español). En otro episodio, Elizabeth Montgomery presta su voz para el personaje de Samantha, prácticamente idéntico al conocido en su serie "Bewitched".

 Fue doblada por Caritina González, quien prestó su voz a Samantha en Bewitched.

En 1967 se estrenó el primer largometraje de esta serie animada: El superagente Picapiedra (The Man Called Flintstone).

 

La trama es una parodia de los gustados filmes de James Bond. Pedro, Pablo, Vilma y Betty tienen unas divertidas aventuras que los llevan a Euroca y ahí a Rocoma y Piedrís. Todo esto debido a que el agente secreto Piedrid Bond, que es casi el gemelo idéntico de Pedro, está siendo perseguido por un par de malvados, Alí y Bo Bo, quienes creen haberse librado de él arrojándolo de un edificio. Piedrid Bond sólo sufre contusiones y unas fracturas y es llevado al hospital. Mientras tanto, Pedro y Pablo van en su troncomóvil llevando a Dino al veterinario. Pedro choca el troncomóvil y es llevado al mismo hospital donde está Piedrid Bond. El accidente de Pedro es menor y pronto está listo para irse a su casa, pero las cosas se complican cuando el jefe Roquín lo recluta para reemplazar a Piedrid Bond y cumplir con la misión de reunirse en Euroca con Tanya, la bella espía que está dispuesta a traicionar a su jefe, el malvado Ganso Verde y su organización Maldosa, a cambio de conocer al apuesto Piedrid Bond. La música y las canciones son estupendas. Desafortunadamente, las nuevas generaciones de admiradores de los Picapiedra no tienen oportunidad de ver esta joya animada debido a complicaciones con los derechos entre Warner Bros., que es actualmente propietaria de Los Picapiedra, y Sony quien es ahora dueña de la compañía que originalmente distribuyó la película, Columbia Pictures/Screen Gems. Esta información ha sido tomada del libro ¿De Quién es la Voz que Escuchas?[3] También hubo 2 películas en persona de Los Picapiedras: Los Picapiedras y Los Picapiedras: En "Rock Vegas"(Las Vegas).[4] Hubo también una película de menor calidad que trata que Vilma se enamora de otro hombre. Hubo otra película títulada Los Picapiedra conocen a Los Supersónicos/The Jetsons Meet The Flintstones donde Los Picapiedras iban al futuro de Los Supersónicos y Los Supersónicos al pasado de Los Picapiedras. El show mantuvo su récord como la serie animada más larga por mucho tiempo, desde su cancelación en 1966, hasta 1997, año en que la serie fue derrotada por la otra famosa serie Los Simpson. De hecho, se hacen varias referencias en esta serie, por ejemplo, en el capítulo ("Marge contra el Monorrail") se puede ver a Homer cantando la famosa canción de entrada de los Picapiedra con la letra cambiada. Así como la aperture guarda cierta similitud.

Con afecto,

Ruben

 


domingo, 18 de julio de 2021

Pablo Neruda Poemas de amor 1

 

Pablo Neruda



 


Veinte poemas de amor y una canción desesperada es una de las más célebres obras del poeta chileno Pablo Neruda (1904-1973). Publicado en junio de 1924, el poemario lanzó a su autor a la fama con apenas 19 años de edad, y es una de las obras literarias de mayor renombre del siglo XX en la lengua castellana.

El libro pertenece a la época de juventud del poeta, ya que fue escrito y publicado cuando no contaba aún con veinte años. Su origen se suele explicar cómo una evolución consciente de su poética que trata de salirse de los moldes del modernismo que dominaban sus primeras composiciones y su primer libro, «Crepusculario».

La obra está compuesta por veinte poemas de temática amorosa, más un poema final titulado «La canción desesperada». A excepción de este último, los poemas no tienen título.

Aunque el poemario esté basado en experiencias amorosas reales del joven Neruda, es un libro de amor que no se dirige a una sola amante. El poeta ha mezclado en sus versos las características físicas de varias mujeres reales de su primera juventud para crear una imagen de la amada irreal que no corresponde a ninguna de ellas en concreto, sino que representa una idea puramente poética de su objeto amoroso.

 

 

 Poemas de amor de  Pablo Neruda 1


(1904-1973)


 

 

 


 

1.Cuerpo de mujer

Cuerpo de mujer, blancas colinas, muslos blancos,
te pareces al mundo en tu actitud de entrega.
Mi cuerpo de labriego salvaje te socava
y hace saltar el hijo del fondo de la tierra.

Fui solo como un túnel. De mí huían los pájaros
y en mí la noche entraba su invasión poderosa.
Para sobrevivirme te forjé como un arma,
como una flecha en mi arco, como una piedra en mi honda.

Pero cae la hora de la venganza, y te amo.
Cuerpo de piel, de musgo, de leche ávida y firme.
Ah los vasos del pecho! Ah los ojos de ausencia!
Ah las rosas del pubis! ¡Ah tu voz lenta y triste!

Cuerpo de mujer mía, persistirá en tu gracia.
Mi sed, mi ansia sin límite, mi camino indeciso!
Oscuros cauces donde la sed eterna sigue,
y la fatiga sigue, y el dolor infinito.

2.En su llama mortal

En su llama mortal la luz te envuelve.
Absorta, pálida doliente, así situada
contra las viejas hélices del crepúsculo
que en torno a ti da vueltas.

Muda, mi amiga,
sola en lo solitario de esta hora de muertes
y llena de las vidas del fuego,
pura heredera del día destruido.

Del sol cae un racimo en tu vestido oscuro.
De la noche las grandes raíces
crecen de súbito desde tu alma,
y a lo exterior regresan las cosas en ti ocultas.
de modo que un pueblo pálido y azul
de ti recién nacido se alimenta.

Oh grandiosa y fecunda y magnética esclava
círculo que en negro y dorado sucede:
erguida, trata y logra una creación tan viva
que sucumben sus flores, y llena es de tristeza.

3.Ah  vastedad

Ah vastedad de pinos, rumor de olas quebrándose,
lento juego de luces, campana solitaria,
crepúsculo cayendo en tus ojos, muñeca,
caracola terrestre, en ti la tierra canta!

En ti los ríos cantan y mi alma en ellos huye
como tú lo desees y hacia donde tú quieras.
Márcame mi camino en tu arco de esperanza
y soltaré en delirio mi bandada de flechas.

En torno a mí estoy viendo tu cintura de niebla
y tu silencio acosa mis horas perseguidas,
y eres tú con tus brazos de piedra transparente
donde mis besos anclan y mi húmeda ansia anida.

Ah tu voz misteriosa que el amor tiñe y dobla
en el atardecer resonante y muriendo!
Así en horas profundas sobre los campos he visto
doblarse las espigas en la boca del viento.

4.Es la mañana

Es la mañana llena de tempestad
en el corazón del verano.

Como pañuelos blancos de adiós viajan las nubes,
el viento las sacude con sus viajeras manos.

Innumerable corazón del viento
latiendo sobre nuestro silencio enamorado.

Zumbando entre los árboles, orquestal y divino,
como una lengua llena de guerras y de cantos.

Viento que lleva en rápido robo la hojarasca
y desvía las flechas latientes de los pájaros.

Viento que la derriba en ola sin espuma
y sustancia sin peso, y fuegos inclinado.

Se rompe y se sumerge su volumen de besos
combatido en la puerta del viento del verano.

5.Para que tú me oigas

Para que tú me oigas
mis palabras
se adelgazan a veces
como las huellas de las gaviotas en las playas.

Collar, cascabel ebrio
para tus manos suaves como las uvas.

Y las miro lejanas mis palabras.
Más que mías son tuyas.
Van trepando en mi viejo dolor como las yedras.

Ellas trepan así por las paredes húmedas.
Eres tú la culpable de este juego sangriento.

Ellas están huyendo de mi guarida oscura.
Todo lo llenas tú, todo lo llenas.

Antes que tú poblaron la soledad que ocupas,
y están acostumbradas más que tú a mi tristeza.

Ahora quiero que digan lo que quiero decirte
para que tú las oigas como quiero que me oigas.

El viento de la angustia aún las suele arrastrar.
Huracanes de sueños aún a veces las tumban.

Escuchas otras voces en mi voz dolorida.
Llanto de viejas bocas, sangre de viejas súplicas.
Ámame, compañera. No me abandones. Sígueme.
Sígueme, compañera, en esa ola de angustia.

Pero se van tiñendo con tu amor mis palabras.
Todo lo ocupas tú, todo lo ocupas.

Voy haciendo de todas un collar infinito
para tus blancas manos, suaves como las uvas.

6.Te recuerdo como eras el ultimo otoño

Te recuerdo como eras en el último otoño.
Eras la boina gris y el corazón en calma.
En tus ojos peleaban las llamas del crepúsculo
Y las hojas caían en el agua de tu alma.

Apegada a mis brazos como una enredadera.
las hojas recogían tu voz lenta y en calma.
Hoguera de estupor en que mi sed ardía.
Dulce Jacinto azul torcido sobre mi alma.

Siento viajar tus ojos y es distante el otoño:
boina gris, voz de pájaro y corazón de casa
hacia donde emigraban mis profundos anhelos
y caían mis besos alegres como brasas.

Cielo desde un navío. Campo desde los cerros.
Tu recuerdo es de luz, de humo, de estanque en calma!
Más allá de tus ojos ardían los crepúsculos.
Hojas secas de otoño giraban en tu alma.

7.Inclinado en las tardes

Inclinado en las tardes tiro mis tristes redes
a tus ojos oceánicos.

Allí se estira y arde en la más alta hoguera
mi soledad que da vueltas los brazos como un náufrago.

Hago rojas señales sobre tus ojos ausentes
que olean como el mar a la orilla de un faro.

Solo guardas tinieblas, hembra distante y mía,
de tu mirada emerge a veces la costa del espanto.

Inclinado en las tardes echo mis tristes redes
a ese mar que sacude tus ojos oceánicos.

Los pájaros nocturnos picotean las primeras estrellas
que centellean como mi alma cuando te amo.

Galopa la noche en su yegua sombría
desparramando espigas azules sobre el campo.

8. Abeja blanca zumbas --ebria de miel en mi alma

9. Ebrio de trementina y largos besos


estival, el velero de las rosas dirijo,
torcido hacia la muerte del delgado día,
cimentado en el sólido frenesí marino.

Pálido y amarrado a mi agua devorante
cruzo en el agrio olor del clima descubierto.
aún vestido de gris y sonidos amargos,
y una cimera triste de abandonada espuma.

Voy, duro de pasiones, montado en mi ola única,
lunar, solar, ardiente y frío, repentino,
dormido en la garganta de las afortunadas
islas blancas y dulces como caderas frescas.

Tiembla en la noche húmeda mi vestido de besos
locamente cargado de eléctricas gestiones,
de modo heroico dividido en sueños
y embriagadoras rosas practicándose en mí.

Aguas arriba, en medio de las olas externas,
tu paralelo cuerpo se sujeta en mis brazos
como un pez infinitamente pegado a mi alma
rápido y lento en la energía subceleste.

10. Hemos perdido aún este crepúsculo.

Hemos perdido aún este crepúsculo.
Nadie nos vio esta tarde con las manos unidas
mientras la noche azul caía sobre el mundo.

He visto desde mi ventana
la fiesta del poniente en los cerros lejanos.

A veces como una moneda
se encendía un pedazo de sol entre mis manos.

Yo te recordaba con el alma apretada
de esa tristeza que tú me conoces.

Entonces, dónde estabas?
Entre qué genes?
Diciendo qué palabras?
Por qué se me vendrá todo el amor de golpe
cuando me siento triste, y te siento lejana?

Cayó el libro que siempre se toma en el crepúsculo,
y como un perro herido rodó a mis pies mi capa.

Siempre, siempre te alejas en las tardes
hacia donde el crepúsculo corre borrando estatuas.

Con afecto,

Ruben